lunes, 20 de septiembre de 2010

Las crueles y salvajes becerradas, otro festejo deleznable

via Byline




Las becerradas son espectáculos en los que animales de muy corta edad, menores de dos años, son torturados y sacrificados.

Algemesí es uno de los muchos pueblos de la comunidad valenciana donde los actos taurinos están presentes en su programa de fiestas. Y entre sus espectáculos nocturnos se incluyen 2 ó 3 días de becerradas. Estas becerradas consisten en la lidia y muerte de varios becerros muy jóvenes cada una de estas noches. Los que torean y matan a estos becerros son festeros del pueblo, que por supuesto, no son profesionales del toreo, esto provoca una autentica carnicería, agonía y sufrimiento extremo para los becerros. Esta sangrienta diversión es contemplada con jolgorio por mayores y niños de muy corta edad, a los que sus padres sin importarles ni la hora del festejo, alrededor de las 12 de la media noche, ni la visón dantesca de sangre, agonía y gritos de dolor de los becerros. Esta es la visión que muchos niños tienen en nuestro país del dolor ajeno, diversión y risas.
Los participantes van borracho y les meten la espada por la pierna, por la barriga, por el cuello. Lo que hacen con los becerros es lo más cruel, salvaje y aterrador que se hace en el País Valenciano, concretamente, en Algemesí.
Según el diccionario taurino, estos animales no podrán "causar peligro debido a sus defensas". O sea, que un becerro es a un toro lo que un cachorro a un perro. Frente a ellos, humanos que los agujerean con banderillas y estoques.
En las becerradas participan aficionados que desconocen lo que es una punzada certera. "Son festeros que no saben lo que tienen que hacer. Y si hablásemos de clavar un sillón..., pero se trata de una animal ingenuo, no sometido a tienta, que entra en la plaza moviendo la cola, trotando, sin saber qué les espera.
Ver cómo a un animal le entra una espada por un lado y le sale por otro es bastante duro. Una carnicería, vamos. No cabe justificación alguna: ni arte, ni tradición ni nada.
Luchamos contra esto, pero no podemos condenar la violencia en la sociedad y luego permitir, con la complicidad del Ayuntamiento, torturas a animales que no pueden defenderse.
El consejero de Presidencia, Justicia e Interior del Gobierno regional, Francisco Granados, se ha mostrado en contra de prohibir las becerradas en la región, tal y como le ha solicitado la Federación de Asociaciones de Protectoras y de Defensa Animal de la Comunidad de Madrid, y ha justificado su decisión en el hecho de que la fiesta del toro "está enraizada en la cultura y las costumbres de todos los españoles".
No es lógico ni civilizado que un pobre becerro muera en una plaza entre los gritos de la gente y la tortura en un espectáculo tan bárbaro. Los que disfrutan viendo sangre y pagan por registrarse en una lista para matarlos no tienen la mente sana. Por eso pedimos al gobierno que prohíba esta salvajada, aunque hayan políticos que se declaren públicamente a favor porque dicen estar enraizada en la cultura y las costumbres de todos los españoles, como dijo el consejero de Presidencia, Justicia e Interior del Gobierno regional de Madrid, Francisco Granados.


Esto es una becerrada (Primera parte)





(Segunda parte)









Sent from my iPhone

El gobierno hace caso omiso a la petición del pueblo español que pide la prohibición del Toro de la Vega

via Byline



A pesar de las numerosas denuncias de los grupos animalistas, cada año se lleva a cabo la ignominia del "Toro de la Vega", una sangrienta tradición en la que un grupo de personas a caballo y a pie persiguen a un toro, al que atraviesan con lanzas hasta darle muerta.
"Más de 400 firmas contra el 'Toro de la Vega" ha recogido las firmas de 405 intelectuales del mundo de la cultura, las artes, la empresa, la docencia, la veterinaria y la protección animal para secundar el manifiesto en contra del Toro de la Vega:
"Los firmantes rechazamos que en España se entienda como cultura la humillación y tortura de un ser vivo, que se llame arte a un derramamiento de sangre. Nos oponemos a la sangría que cada septiembre se perpetra en Tordesillas con el llamado Toro de la Vega, en la que cientos de hombres a caballo y otros tantos a pie, acosan por un campo a un toro indefenso hundiéndole sus lanzas hasta la muerte. Quienes refrendamos este manifiesto como artistas e intelectuales de la literatura, de la música, de la escultura, de la danza y del pensamiento en general, pero sobre todo, como seres humanos capaces de avergonzarnos ante la barbarie demostrada por algunos miembros de la especie a la que pertenecemos, unimos nuestras voces desde la verdadera cultura, desde el verdadero arte, los que se conciben como un bien de los pueblos, aquellos que los hacen crecer y avanzar, no embrutecerse y anquilosarse. El Toro de la Vega representa, únicamente, una tortura pública, así como los demás espectáculos con toros en España y en otros países de habla hispana. Exigimos la abolición de tales aberraciones, de las que nos negamos a ser cómplices ante un mañana que se horrorizará de la crueldad de unos pocos frente al silencio de tantos."








Este es el festejo El Toro de la Vega:








Sent from my iPhone